3-4-2023 LOS E.E.U.U. DE TRUMP

Desde luego para él no representan al país los que ahora le están acusando y van a juzgarle. Alvin Bragg el fiscal, es demócrata y por tanto políticamente un adversario. Y en cuanto al juez Juan Merchan, nacido en Colombia, Trump seguro que duda muy seriamente de su independencia e imparcialidad. Además ninguno de ellos tiene nada que ver con los valores que hicieron grandes en su historia a los Estados Unidos. ¿Porqué entonces esperar que se haga justicia?.

 

Al margen de ideologías y concepciones, -cada uno tiene las suyas-, por lo menos alguna razón se le ha de dar a Trump, si se plantea la cuestión desde una vertiente puramente técnica y objetiva. Esto es, la de determinar la idoneidad de unas personas o unos profesionales que van a administrar justicia con un bagaje y antecedentes que pueden constituir un lastre a la hora de adoptar decisiones en este ámbito.

 

Pero no he leído últimamente comentarios que abunden en esta cuestión. Se limitan a explicar que éste es el sistema que rige en el país. Esto es, fiscales y jueces son objeto de elección y evidentemente los partidos tienen en ello una influencia. Determinante, a veces. Sin ir más lejos las designación que no elección efectuada por el mismo Trump para magistrados del Tribunal Supremo. Y ciertamente cabe asumir que una vez producida la elección, el que fue candidato con algún significativo apoyo, se convierta en independiente e impermeable a cualquier tipo de presión o condicionamiento. Independiente al margen de quien pueda ser un día el que comparezca ante el tribunal.

 

Desgraciadamente la respuesta que ha de darse a todos estos interrogantes, no podrá ser nunca muy contundente. Ni podemos decirle a Trump que está muy equivocado con sus observaciones y sus críticas,- porque quizá no lo está-, ni tampoco pese a ellas, vamos a considerar que fiscal y juez no puedan cumplir, en esta hora, con sus responsabilidades en el ejercicio de su función. Forma todo ello parte de la misma condición humana.

 

Al margen de sus desvaríos, mejor desearle suerte a Trump. Porque también en el mundo de la justicia, la suerte tiene su importancia.

 

3 de abril de 2023