10-10-22 ARMAGEDDON

Biden ha dicho recientemente que la humanidad se enfrenta a un Armageddon nuclear. Que estamos viviendo tiempos muy difíciles, una crisis semejante a la que protagonizó Kennedy, hace años, cuando el desembarco de misiles en Cuba. Pero recuerdo que en aquella época Kennedy forzó el que estas armas desaparecieron de la isla y Kruschev renunció a este objetivo.

 

Y la diferencia hoy es muy clara. Mientras que en su momento Kennedy no se limitó a explicar al mundo lo que estaba sucediendo, sino que adoptó unas sin duda, históricas decisiones, ahora Biden solamente,- por lo menos por lo que leemos,- ha anunciado el riesgo, pero sin tomar medidas que contribuyen a paliarlo o hacerlo desaparecer. Y a mi juicio,- lo he dicho en otras ocasiones en este blog-, el medio para terminar la contienda se configura a partir de que los líderes de los grandes países lleguen a un acuerdo con el Kremlin y que la nueva situación política se concrete en que Ucrania forme parte de la OTAN con carácter inmediato, mientras Rusia consolida sus posiciones en el Donbas.

 

Ya sé que esta transacción no va a contar con el entusiasmo de los ucranianos pero no puede olvidarse que si Ucrania sigue siendo un país libre, lo es en gran parte por la asistencia militar y económica que le están prestando sus aliados. Resulta coherente por ello que sean estos aliados lo que busquen una fórmula para terminar con la contienda. Si Ucrania forma parte de la OTAN blinda ya su territorio a favor de los países occidentales y blinda también su libertad. No existe otro camino, por lo menos no lo veo, y no creo que de la guerra pueda salir un vencedor, aunque por supuesto solamente uno lo merezca.

 

A ver por tanto, si en la mesa de las negociaciones se pone fin a las hostilidades. Naturalmente sin la complacencia de todos. Pero esto sucede en todas las guerras. Y necesitamos un armisticio que ponga punto final a todo ello.

 

Ya.

 

lunes, 10 de octubre de 2022